A NUESTRA Sofía
Son casi ya tres años de no ofenderte, de no herirte, de no beberte, en suma de no tenerte;
Fueron tres meses de soñarte, de anhelarte…
De incrustarte en mi inconsciencia,
Fueron paraísos oníricos
Pero también pesadillas.
Ahora puedo diferir los tiempos en que te sueño, aunque créeme, no me esfuerzo en soñarte.
Llegas a mí como un instante,
Llegas con la luz del primer ataque solar;
Y yo, erguido, inmóvil, en las trampas del silencio, mudo en el carnaval, sujeto a ser sujeto,
Ciudadano del averno,
Itinerario tardío de huidas sangrantes y en promoción,
Pero con los oídos más aguzados y en estado de alerta,
¡Firme!
Por si las moscas…
LEON PLATA
Bucaramanga, 19 de octubre de 2005.